jueves, 27 de noviembre de 2008

Jardines virtuales














Dicen que dicen los cabalistas hebreos que el nombre que das a tus hijos es el futuro que le asignas.



Que cada nombre tiene un futuro distinto, sito en los arcanos a los que sólo su oscura ciencia puede arribar.



No se si será para tanto, pero sí es cierto que todas las acciones de la vida, incluida nuestras más insignificantes palabras, tienen consecuencias para nosotros y los demás.
Los jardines virtuales, que se regalaban a a los padres que acababan de tener sus criaturas, tenían esa filosofía. Nacieron como planos secretos que se regalaban a los padres, y contenían información sobre el significado del nombre de los hijos. Buscaba un árbol que respondiera a las características del nombre del bebé, y se arrancaba de los padres la promesa de que con esos planos se plantaría el árbol, que crecería en paralelo a la nueva vida que acababa de nacer.



Ahora los jardines son cualquier cosa, según la inspiración del día en el que lo realice.



María, Esperanza y Gonzalo son tres hermanos sevillanos. Sus respectivos cuadros aluden a su ciudad natal, y luego distintas imágenes alusivas al significado de sus nombres: María tiene una abstracción de imágenes marianas y fachadas de iglesias sevillanas, junto a la Giralda y la Torre del Oro. Esperanza tiene dos figuras, la Giraldilla y la Esperanza, portando la cornucopia con la que se la imaginaron los antiguos. Gonzalo, como indica su nombre, confronta a la Giraldilla con Minerva, la diosa que era de la batalla, así como de la cultura y el conocimiento.



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